El debate sobre la regulación del cannabis en México ha alcanzado un punto crucial donde es necesario encontrar un equilibrio entre las oportunidades económicas y la protección de la salud pública, según un reciente análisis publicado en Forbes México.

Evidencia científica respalda el potencial del cannabis

El 2024 marcó un hito en la investigación cannábica con más de 4,000 estudios publicados a nivel mundial, demostrando el creciente interés científico en comprender los beneficios y riesgos del cannabis. Entre los hallazgos más relevantes, destaca un metaanálisis que encontró mejoras significativas en niños y adolescentes con autismo tratados con extractos ricos en CBD, reduciendo la ansiedad y mejorando la interacción social sin efectos adversos relevantes.

Desmitificando preocupaciones comunes

Contrario a los temores habituales, la evidencia demuestra que la legalización no incrementa el consumo entre adolescentes. En Colorado, pionero en la regulación recreativa, las encuestas escolares revelan que el uso de cannabis entre estudiantes de secundaria ha disminuido desde 2013. Para 2023, solo el 12.8% de los jóvenes reportaron haber consumido cannabis en el último mes, comparado con el 19.7% previo a la legalización.

El cannabis como motor económico

El potencial económico del cannabis es innegable. En Estados Unidos, se proyecta que las ventas legales alcanzarán los 35 mil millones de dólares en 2025, con un impacto económico total que podría superar los 123 mil millones considerando el efecto multiplicador en industrias relacionadas como agricultura, logística y tecnología. Por cada dólar gastado en cannabis en un dispensario, se generan otros 2.50 dólares adicionales en la economía local.

Experiencias internacionales como guía

Países como Canadá, que duplicó sus exportaciones de cannabis medicinal en el primer semestre de 2024, y Alemania, que tras legalizar el uso adulto en 2024 se ha convertido en uno de los principales importadores, ofrecen modelos a considerar. También Uruguay y su enfoque estatal, con venta en farmacias a precios bajos complementada con clubes de cultivo, representa otra alternativa.

Oportunidad única para México

Con su clima privilegiado, experiencia agrícola y ubicación geográfica estratégica, México tiene el potencial de convertirse en un actor clave en el comercio internacional de cannabis. Con más de 125 millones de habitantes, nuestro país podría establecerse como el mayor mercado de cannabis en el mundo hispanohablante.

Sin embargo, para aprovechar esta oportunidad, es fundamental establecer un marco legal claro, competitivo y basado en evidencia científica. La regulación responsable permitiría desincentivar el mercado ilícito, ofrecer alternativas médicas seguras, atraer inversión y garantizar condiciones laborales dignas para quienes cultivan y procesan la planta.

Un llamado a la acción

El momento de actuar es ahora. La pregunta ya no es si debemos regular el cannabis, sino cómo hacerlo de forma inteligente, responsable y con visión de futuro. La industria cannábica mexicana está lista para colaborar con autoridades, académicos y la sociedad civil en el diseño de una política pública moderna, justa y eficaz.

Para más información sobre este tema, puedes visitar ANICANN, organización dedicada al desarrollo responsable de la industria del cannabis en México.

Fuente: Forbes México, «Cannabis en México: entre la salud pública y el desarrollo económico»

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